Lo que implica conocer gente nueva [Caurd]

por **Aidan G. Kendrick** Vie Mayo 17, 2013 8:54 pm

Era sábado, no había clases y no tenía nadie con quien salir, o al menos nadie me lo había propuesto, por lo cual estaba en casa tratando de concentrarme en un libro de química que había conseguido de mi padre hacía una semana atrás, y aunque encontraba la temática bastante interesante no lograba atraparme por completo, quería salir, hacer algo, así que di un salto fuera de la cama y a la vez que me despedía de mi padre corrí hacia los talleres donde un amigo de mi padre me dejaba estar para ayudarle… o simplemente para continuar con mis experimentos.

Llegué a los talleres, el señor Hudson me saludó y me dejó pasar sin decir nada más, yo le sonreí a la vez que entraba para disponerme a continuar con el trabajo que estaba haciendo hace algunos días; el señor Hudson me dejaba desarmar los aparatos que ya no tenían arreglo para observar su funcionamiento y sus partes internas detalladamente así podía descubrir la falla además que me dejaba quedarme con las refacciones que él no utilizaba. Así me dispuse a desarmar un ordenador portátil a la vez que iba identificando pieza por pieza y las apartaba; la causa del desperfecto era una falla en la placa base la cual ya no tenía arreglo ya que se había quemado tras un sobrecalentamiento. Estaba sacando el microprocesador cuando la voz de alguien me sacó de mi estado de concentración. Me asomé y vi a un chico rubio que no había visto antes, lo cual me llamó la atención, así que salí a recibirlo ya que tan concentrado había estado con el trabajo del ordenador que no me había dado cuenta que el señor Hudson había dejado el taller un momento a comprar unos cables que le hacían falta y que volvería en 15 minutos, según la nota que estaba en el mostrador.

Me acerqué al mostrador algo nervioso, porque además de que no lo conocía, generalmente no era a mí a quien le tocaba atender a los clientes cuando venía al taller, por lo que sonreí tratando de no lucir angustiado y esperando que esos intentos no me hicieran lucir extraño. –H-Hola, ¿necesitas algo?- Murmuré nerviosamente. –El Sr. Hudson no está aquí por el momento pero, puedo ayudarte o si quieres puedes esperar a que regrese, no creo que tarde mucho.- Continué mientras me asomaba por fuera del mostrador esperando que en cualquier momento dicho hombre se apareciera.

por **Caurd X. Strauford** Mar Mayo 21, 2013 12:25 pm

El distrito tres me encantaba, por tanto lo visitaba siempre que podía. ¿Que porque? Porque aquí estaban los artículos electrónicos de mejor calidad de todo Panem, bueno, sin contar los del Capitolio, pero aún así los del Captiolio salían de aquí, así que técnicamente antes de ser enviados al Capitolio están aqui y... y que me hago un lío yo solo. Pero bueno, ya fuesen teléfonos móbiles, ordenadores o videojuegos siempre venía aquí a comprarlos. No es que no hubiese tiendas de electrónica en el distrito dos, pero en general aquí eran las cosas más baratas y de mejor categoría. Además la gente de este distrito entendía del tema mucho mejor que los dependientes de las tiendas del distrito dos, así que podían aconsejarme mucho mejor sobre el tema.

Así que en el día de hoy había decidido visitarlo en un arrebato, como casi siempre que decidía hacer... cualquier cosa. Gajes de ser hiperactivo, en el momento en que pensaba algo tenía que hacerlo o explotaba. El caso es que nada más bajarme del tren ya sabía más o menos a donde tenía que dirigirme, conocía donde estaba la sección de la ciudad de las tiendas y almacenes más interesantes. A veces pienso que habría encajado bastante más si huibiese nacido en el distrito tres, mi curiosidad y pasión por la tecnología solo eran comparables a la de los habitantes de este distrito. Aunque quizás fuese mejor así, si hubiese tenido acceso a cualquier material tecnológico desde mi nacimiento... seguro que ya habría hecho saltar Panem por los aires accidentalmente hace tiempo.

Finalmente me paré frente a un taller/almacén/tienda (no tenía ni idea de lo que era) que no había visto nunca. Miré el nombre, por lo visto pertenecía a un tal sr. Hudson, sonaba a nombre de anciano con un pasado interesante y una tienda llena de recuerdos. ¡Seguro que tenía restos de tecnología de la era pasada, a los tiempos anteriores a Panem!... ¡Pero que tontería! ¡Nadie era tan viejo! Además seguro que no quedaban restos de esa época... aún así tenía que comprobarlo.

Entré en la tienda haciendo sonar el timbre que indicaba que un cliente acababa de entrar. - ¿Hola? - pregunté al no ver a nadie en el mostrador. Entonces un chaval de más o menos mi edad apareció al otro lado. Ennarqué las cejas, pues parecía que me había equivocado con el tal Hudson... no, vale, el chico me aclaró que Hudson estaba fuera. Sonreí y reí levemente ante mis pensamientos. - A, de acuerdo, de acuerdo. - dije mirándolo con una sonrisa radiante, como siempre. - Pues nada, simplemente estaba paseando por el barrio y quería saber que se vende o se hace aquí. - dije asomando la mitad de mi cuerpo por el mostrador y viendo lo que había detrás. - ¿Trabajas aquí? ¿No eres muy joven? - había oido que en algunos distritos los niños trabajaban desde muy jóvenes, pero eso no solía ocurrir en los distritos altos...

por **Aidan G. Kendrick** Mar Mayo 21, 2013 1:36 pm

Quien estaba frente al mostrador, era un chico joven, quizá de mi edad, se le veía divertido, acelerado y no dejaba de sonreír, lo cual me hizo tranquilizarme un poco y tal vez su sonrisa era contagiosa porque sin darme cuenta ya estaba sonriendo también. Me saludó y después preguntó sobre lo que en el negocio se hacía, no dejaba de mirar alrededor y se asomaba para observar lo que había tras el mostrador. – Es un taller de reparaciones, especialmente de ordenadores. – Le respondí. Pero no había terminado de contestarle cuando ya me preguntaba algo más, sobre si trabajaba aquí. – Ah… no, no en realidad. El dueño me deja venir a practicar lo que aprendo en la academia, además que me gusta experimentar con los aparatos o crear cosas nuevas, así que me presta algunas de sus herramientas o refacciones que ya no necesita. – Le dije. Siempre que hablaba de lo que me gustaba hacer lo hacía de manera entusiasta y alegre, siendo que no hablaba con muchos el hacerlo, aunque sea un poco, me animaba.

Se le veía bastante emocionado con lo que nos rodeaba, y siendo que en el distrito era habitual para nosotros estar rodeados de aparatos y cables, y que su cara no se me hacía familiar pensé en que tal vez no era de por aquí. La posibilidad de que no fuera del distrito 3 me emocionaba, ya que no era común en mí convir con gente de otros distritos, pero me interesaba mucho conocerlos todos incluso aunque no se nos tenía permitido hacerlo, así que sin pensarlo más me dispuse a despejar mis dudas. – No te había visto antes, ¿no eres de por aquí?- Me atreví a preguntar. Es obvio que no puedes conocer a todas las personas del lugar donde vives, pero aun así me fascinaba la idea de conocer gente de otros lados, por lo que esperé a que así fuera. – Y ahmm… disculpa, por preguntar ten repentinamente, incluso ni siquiera me conoces. Mi nombre es Aidan Kendrick. – Me presenté con una sonrisa apenada poco después de preguntar de donde venía.

por **Caurd X. Strauford** Sáb Mayo 25, 2013 2:51 pm

Asentí, así que aquí se reparaban cosas, no se vendían. Era curioso porque la gente de los distritos altos tendía a sustituir el objeto roto en lugar de repararlo porque no había grandes problemas económicos. No obstante no todo el mundo tenía el mismo nivel de vida ni todos los objetos serían igual de reemplazables, al menos eso suponía. De todas maneras yo no entendía demasiado de electrónica, me encantaba y era muy curioso al respecto, y siempre buscaba aprender más al respecto, pero en el distirto dos no había muchos lugares dedicados a eso, así que las oportunidades escaseaban. Aunque bueno, siempre estaba internet.

Volví a colocar los pies en el suelo y crucé los brazos sobre el mostrador mientras el chico me explicaba a que se dedicaba. A vale, así que estaba en prácticas, asentí ante su explicación, comprendiendo. En el distrito dos teníamos las prácticas para los juegos, para ser profesionales, aquí tenían prácticas con la electrónica, aunque bueno, él no había dicho que "tenía" que venir, si no que "le dejaban", así que supuse que sería algo optativo. De todas formas las prácticas en las academias de mi distrito teóricamente también eran opcionales... no obstante todo el mundo iba. - ¿Pero vienes por gusto o es obligatorio? - decidí que para salir de dudas lo mejor era preguntar.

-No, soy del distrito dos. - dije mientras luchaba por sacar mi teléfono móbil del bolsillo para ver la hora. - ¡Encantado Aidan, y soy Caurd Strauford! - me presenté con entusiasmo, al hacerlo estendí la mano para tendérsela a modo de saludo sin embargo olvidé que tenía el móbil medio sacado del bolsillo al hacerlo así que este se calló al suelo dando un sonoro golpe que no me gustaba nada. - Ag... mierda. - murmuré mientras me agachaba para recogerlo. Pulsé repetidamente los botones pero no reaccionaba, fruncí el ceño un instante pero finalmente volví el rostro hacia él. - ¿Decías que esto era un taller de reparaciones? - puse el celular en el mostrador, justo delante suya. - ¿Querrías...?

por **Aidan G. Kendrick** Jue Jun 27, 2013 1:42 am

Se le veía atento a lo que le contaba acerca de lo que hacía en el taller, lo cual me alegró. Mi relación con otros chicos de mi edad era más complicada de lo que parecía, ya que en realidad mis capacidades para hacer amigos eran algo limitadas y aún si no me daba cuenta terminaba alejando a las personas con las que trataba de fraternizar. Era una persona complicada… pero siempre me esforzaba, por lo cual esta ocasión no sería diferente. Y al parecer el interés en lo que hacía en el lugar no se esfumaría con facilidad, ya que me preguntó más cosas. – Ahmm… pues en verdad vengo más por gusto. – Dije algo avergonzado, era cierto que en el distrito muchos amaban lo que hacían, pero en cuanto a los chicos más jóvenes apreciaban de diferente forma sus ratos libres y preferían divertirse al aire libre que estar encerrados en un taller rodeado de cables y tornillos. – Aunque sí tenemos prácticas en la academia por supuesto, las cuales vengo a hacer aquí también, pero ahora mismo no tenía nada mejor que hacer así que vine para entretenerme un rato.- Continué mi explicación, no estaba seguro si me preocupaba que me considera extraño por divertirme de esta manera, pero tampoco era alguien al que se le diera bien el mentir así que decidí no hacerlo.

Entonces él dijo algo que me emocionó mucho, había acertado con mi suposición de su origen, ya que no era de este distrito sino del 2. Un distrito del que muchos hablaban con algo de temor, debido a su actividad principal y las cualidades de sus tributos. Entonces me di cuenta de cómo el conocer mal algo te hace hacer malas conjeturas, porque en realidad este chico era todo lo contrario a una persona intimidante a como cualquier hubiera imaginado. –¡Mucho gusto!- Respondí emocionado extendiendo la mano y responder a su saludo, sin embargo justo en ese momento el móvil que sacaba de un bolsillo cayó, él se agachó en un instante para recogerlo y presionó los botones repetidamente, se le veía molesto, seguramente el aparato se había arruinado. Entonces me miró y puso el celular delante de mí pidiéndome que lo reparara –¿E-Estás seguro? – Contesté algo nervioso, es cierto que había hecho reparaciones antes, pero habían sido principalmente prácticas, no para un cliente real. – Si quieres podemos esperar al señor Hudson…- Me preocupaba que no quedara bien el trabajo si lo hacía yo, pero tampoco quería decepcionarlo, así que… -Está bien. Pero pasa, dentro están las herramientas y todo lo necesario para arreglarlo y no quiero dejarte esperar afuera. – Abrí una pequeña puerta en el mostrador y lo invité a pasar hacia el taller. –Puedes sentarte aquí si quieres. – Le acerqué una silla y yo me dirigí a la mesa de trabajo frente a él, dispuesto a reparar el móvil.

off: Disculpa la tardanza >.<